sábado, 27 de noviembre de 2010

Tiempo

"El tiempo pasa y cada momento es mejor, único siempre y eso me hace estar feliz y con una sonrisa en mi cara. Momentos difíciles pero q siempre terminan pasando, positiva siempre y por eso me quedo con lo mejor. Noticias y sorpresas que me hacen pensar en las cosas y personas que realmente merecen la pena. Instantes de alegría q deberían durar toda la vida. Pensamientos que siempre tendrían que estar en mi cabeza, preocupándome solo por las cosas importantes y dejar a un lado lo que no tiene sentido.
Me gusta sentirme así, pensando en todo y en todos. Miles de sueños que sé que se van a cumplir, y ahí, sere yo, feliz de haber llegado porque yo he querido, agredeciendo a esas personas todo lo q hacen por mí y que sin ellas sería imposible ser yo, lejos de algunas pero se que estan ahí. Solamente gracias por cada palabra, gracias por cada momento." Isa

viernes, 26 de noviembre de 2010

Báilame el agua

Báilame el agua.
Úntame de amor y otras fragancias de tu jardín secreto. Riégame de especias que dejen mi vida impregnada de tu olor.
Sácame de quicio. Llévame a pasear atado con una correa que apriete demasiado.
Hazme sufrir. Aviva las ascuas.
Ponme a secar como un trapo mojado.
No desates las cuerdas hasta que sea tarde. Sírveme un vaso de agua ardiente y bendita que me queme por dentro, que no sea tuya ni mía, que sea de todos.
Líbrame de mi estigma. Llámame tonto.
Sacrifica tu aureola. Perdóname. Olvida todo lo que haya podido decir hasta ahora.
No me arrastres. No me asustes. Vete lejos. Pero no sueltes mi mano.
Empecemos de nuevo. Sangra mi labio con sanguijuelas de colores.
Fuma un cigarro para mí. Traga el humo. Arréglalo y que no vuelva a estropearse.
Échalo fuera. Crúzate conmigo en una autopista a cien por hora.
Sueña retorcido. Sueña feliz, que yo me encargaré de tus enemigos.
Dame la llave de tus oídos. Toca mis ojos abiertos. Nota la textura del calor. Hasta reventar.
Sé yo mismo y no te arrepentirás. ¿Por cuánto te vendes?.
Regálame a tus ídolos. Yo te enviaré a los míos.
Píllate los dedos. Los lameré hasta que no sepan a miel. Hasta que no dejen de ser miel.
Sal, niega todo y después vuelve.
Te invito a un café. Caliente, claro. Y sin azúcar. Sin aliento.
.......